Folk Tale

La Moda

AuthorFélix María Samaniego
LanguageSpanish
OriginSpain

Después de haber corrido cierto danzante Mono por cantones y plazas, de ciudad en ciudad, el mundo todo, logró, dice la historia aunque no cuenta el cómo, volverse libremente a los campos del África orgulloso. Los monos al viajero reciben con más gozo que a Pedro el zar los rusos, que los griegos a Ulises generoso. De leyes, de costumbres, ni él habló ni algún otro le preguntó palabra; pero de trajes y de modas, todos. En cierta jerigonza, con extranjero tono les hizo un gran detalle de lo más remarcable a los curiosos. -Empecemos, decían, aunque sea por poco. Hiciéronse zapatos con cáscaras de nueces, por lo pronto. Toda la raza mona andaba con sus choclos, y el no traerlos era faltar a la decencia y al decoro. Un leopardo hambriento trepa para los monos: Ellos huir intentan a salvarse en los árboles del soto. Las chinelas lo estorban, y de muy fácil modo aquí y allí mataba, haciendo a su placer dos mil destrozos. En Tetuán, desde entonces manda el senado docto que cualquier uso o moda, de países cercanos o remotos, antes que llegue el caso de adoptarse en el propio, haya de examinarse en junta de políticos, a fondo. Con tan justo decreto y el suceso horroroso, ¿dejaron tales modas? Primero dejarían de ser monos.


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